Nuestro cuerpo puede ser víctima de muchos problemas, algunos de ellos están fuera de nuestro control como son las cosas hereditarias o similares pero la verdad.
Es que muchas de ellas son realmente nuestra culpa, como lo es el caso de la higiene de nuestro hogar.
La higiene es un factor importantísimo en nuestra vida, ya que no solo es cuestión de estética y de estar a gusto en un sitio, sino que nuestra salud.
Depende directamente de ella y si bien es cierto que tener la sala en general ayuda, nuestra cama debe ser el sitio más limpio de la misma sin lugar a dudas.
Nosotros pasamos una gran cantidad de tiempo en nuestra cama y si no tenemos la higiene necesaria, en ella aparecerán los famosos ácaros a amenazar nuestra salud, de hecho, hoy te contaremos una costumbre que muchos hacen y ni tienen idea el daño que causan, veamos de que se trata.
La razón por la que no debes tender tu cama cuando te levantas
Lo que ocurre es que tenemos una costumbre la cual es acomodar o tender nuestra cama apenas nos levantamos, esto para muchas personas es sinónimo de bienestar y ser ordenados, pero la realidad es que nos hacemos daño con esta costumbre, todo debido a los ácaros.
Ellos les encanta la humedad por lo que debido a nuestro sudor y simplemente el calor corporal, causan que al despertarnos debajo de las sábanas se encuentre esa zona húmeda.
Si las atendemos de inmediato hacemos que esa humedad se retenga en el sitio, cuando realmente lo más beneficioso de todo es dejarla así, para que la humedad pueda escapar de ahí y por ende aleje a todos los molestos ácaros.
Aparte de esto, te recomendamos fuertemente que mantengas la higiene de tu cama, recordemos que aquí pasas la mayoría de tu vida por lo que debes evitar comer lo mas que puedas en ella.
Además, es importante que cambies las sábanas regularmente para así mantenerse limpio y libre de esos animales molestos.
Adicional, las almohadas deben también ser cambiadas regularmente, la indicación clave es cuando sientes que están más pesadas que antes, esta es una clara señal del cambio.